Las llagas se resecan como hojas cúpricas.
Mis cuencas acumulan raíces que beben soledad.
Soy una silueta difusa y un reguero de miguitas de pan
hervidas en sangre seca.
Necesito mi cordón de plata.
¿Alguien ha visto mi cordón de plata?
Necesito separar mis ojos de mis pies.
Si me veis, veréis un bello bulévar sin enamorados.